Hace un año estaba en situación de cesantía por lo que tenía que vérmelas con el desagradable ambiente del Servicio Andaluz de Empleo, con gritos, colas y funcionarios superstresados.
La base de datos del estado sólo sabía de mi que tenía el bachillerato. Era hora de actualizarla, por lo que le entregué a la funcionaria todos mis títulos, certificados e historial laboral... no se lo creía: "Usted es ingeniero, con estas experiencias internacionales, habla alemán/inglés/un poco de portugués, posición en el sector de las renovables y está en paro?". Pacientemente le expliqué la realidad. Que no se creyera las noticias de "Se necesitan 50.000 especialistas en renovables en los próximos 2 años", "sector de futuro, revolución energética" y demás "efectos llamadas" de gentes viviendo alrededor de la revolución verde: fundaciones, centros de enseñanzas regladas (y no), periodistas analistas, pensadores sociales...
Existían potentes actores en el sector energético, que ante la bajada en la demanda estaban decididos a no perder ninguna parte del pastel, el sector había sido legalmente masacrado, no es país para pymes, listo!.
Pero la funcionaria me tenía una solución!, el plan MEMTA dentro del programa Andalucía Orienta. Una vez mas el sistema no me fallaba, se preocupaban por mi bienestar!!!, me pidió de inmediato cita con mi "asesor personal", dirección: sede de UGT. (????).
Intenté indagar sobre el papel de la UGT, pero la funcionaria se cortocircuitó, no esperaba que un parado preguntara por la orden, instrucción o legitimidad legal de la UGT para realizar una labor oficial.
La entrevista de orientación me dejó tan frío como esperaba, UGT me ofrecía realizar un curso de Formación de Formadores y especializarme en la enseñanza de las energías renovables, montones de curso impartidos por UGT, que están (palabras literales) "excelentemente bien pagados con fondos europeos".
A mi asesor personal del sindicato ni siquiera me molesté en explicarle lo estúpido de formar a futuros parados con conocimientos de energías renovables.
Empecé el análisis de la oportunidad: posibilidad de hacer carrera en "la inevitable revolución verde", me imaginé impartiendo cursos, pensé en ir mas allá!, contactar con revistas especializadas y ofrecer (de manera gratuita) artículos desde un punto de vista técnico-light sobre renovables, podía dar a conocer las tecnologías y sobre todo mi nombre lentamente, podría formar parte del "sistema"!, tener un sueldecito/contratito al calor de la UGT. Tenía contactos, ganas, conocimientos...
Por otro lado sabía que era un mundo moribundo, habían empezado las dentelladas buscando trozos del presupuesto menguante, en Internet había preocupantes quejas sobre falta de fondos en el plan MEMTA. Pero la verdadera verdad es que sentía asco, mucho asco de un sistema absurdo que pretendía entretener a los parados mientras algunos hacían trabajos inútiles bien renumerados "por Europa".
No me tomé la molestia en llamarles de nuevo. Maleta o Metralleta.
Así que continué haciendo entrevistas para Ginebra (con perdida de maleta incluida), Düsseldorf, Munich, Londres, Hamburgo, Glasgow, Daran, Abu Dhabi, México, Río y finalmente Santiago de Chile.
La ayuda que obtuve por parte de la administración fue la amenaza de retirarme el desempleo por salida del país sin aviso. Sé que hay que cumplir la ley, aunque sean ridículas y contraproducentes con el objetivo final: la marcha de España y que existiera un parado menos.
Ahora sé que fue un periodo infernal, aunque me cargué de paciencia y no me lo pareció.
Aunque los parados son un colectivo relativamente numeroso, está muy poco cohesionado, nadie quiere verse como un perdedor, por lo que son presa ideal para recortes en prestaciones, y sobre todo un trato mas denigrante por vagos, colectivo perfecto para machacarl(n)os.
La verdad es que lo de este país es de chiste. Unos sindicatos vendidos al mejor postor, una patronal estrangulante, unos políticos sobrados y una función pública que, viendo durante años tantos desmanes, ahora protestan.
ResponderEliminarMás vale tarde que nunca pero lo suyo hubiera sido denunciarlo en pleno apogeo.
Enhorabuena por el blog y la experiencia.
A mí me dieron un curso los de la UGT cuando me estaba preparando oposiciones. Te daban la friolera de 120 "horas" de curso por el "módico" precio de 120 euritos. Eso es 1,2 puntos en la nota de oposición, así que ¡A tragar!
ResponderEliminarEsperando que el dinero se justificara de alguna forma ¡Qué dices! Era un timo como un piano.
Pedían unos cuestionarios On Line y creo que no se los leían. Además el material era de interés nulo. Limitándose a copiar los decretos de la administración y una serie de lugares comunes de pedagogo de esos tontorrones que le gusta a la administración educativa.
Ese coladero es una forma de financiar los sindicatos y otra serie de parásitos que tenemos que sufrir.
Si hubiera transparencia de la buena, estop no pasaría.
paciencia y humor no te han faltado en las experiencias que compartes y que hacer ver que no te mereces estas situaciones
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