Mientras algunos disfrutan de un merecido descanso en la playa (MALDITOS CABRONES...), otros nos dedicamos a nuestros proyectitos de ingeniería, y además con objetivos personales que lo hacen mas difícil todavía!.
En este mi segundo invierno en 6 meses me cansé de andar con maletines de cueros pasados de moda. En Chile todos llevan mochilas, como los ejecutivos del AVE. Persiguiendo un anhelo de convertirme en una perfecta y engrasada máquina comercial, sin alma, sin procrastinaciones, prostituyendome al 2,5% y que GTD (Getting Things Done), ni genere papel manuscrito, ni me obligue a clasificar y archivar cosas en oficinas temporales, aún manteniendo toda la información a mano y accesible en una búsqueda.
La historia de este propósito empezó en mi transición de "parado por cuenta ajena", a "desgraciado por cuenta propia". En ese momento la euforia de saber que tus gastos desgravaban, me lancé a la compra de la santísima triada: Smartphone HTC / Tablet Samsung y Portátil ASus.
La tablet de 300€ se la pasé a Joaquín para ahorrar hablando por Skype, el móvil y portátil me servirían en mis aventuras sudamericanas hasta que me lo birlasen (pensaba yo antes de conocer Las Condes...). Sofisticadas herramientas de trabajo en un país donde HTC y Asus no están muy implantadas (acierto total!).
Entonces descubrí los servicios en la nube...
Dropbox 25Gb y Evernote se unieron al Google Calendar, el Google Documents se convirtió en Google Drive y por último actualizaron el firmware de mi NAS, de forma que podía acceder a mis pilículas y música en casa desde cualquier lugar del mundo!, y con independencia del dispositivo utilizado!.
Desde entonces y dada la necesidad de una distante vida en remoto, empecé con disciplina a recopilar, digitalizar y ordenar información en la nube, por consiguiente la agenda y papeles se iban haciendo mas innecesarios. Si hacía una foto esta aparecía mágicamente en mi carpeta de Dropbox tanto en Alcala como en Santiago, Mónica veía casi en directo el Sushi (para ella pastelitos) que comía, las facturas las pasaba a fichero y clasificaba casi en el mismo momento que se generaban ...
Ayer decidí a dar una vuelta de rosca contra el papel: tomar notas en la reunión directamente del portátil en evernote. La documentación que me dejaron la escaneé con el móvil, la anexé a las notas y la devolví a mi sorprendido interlocutor. No sé si quedé de maravilla o como un imbécil, pero lo cierto es que produjo impresión, marcando distancia con la barrera de fino aluminio de mi ultrabook de Penúltima Generation.
Mi objetivo del verano es el minimalismo total, prescindir de lo accesorio, un único traje para el verano, digo invierno (con varias combinaciones camisa-corbata) y una oficina reducida a un único dispositivo, eso sí, con cámara para escanear, y antena para comunicarme a través de los vestíbulos y oficinas ajenas, y SIEMPRE buscando una conexión con la nube. Todo ello mientras espero mi autorización administrativa de permiso de residencia definitiva que me dé acceso al ansiado contrato de datos con Movistar, Claro o Entel.
Ayer vi "Up in the Air" de gorg kluni.
Lo conseguiré??
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