Recién aterrizado, instalado y trajeado, tomé un taxi hacia la fundación Eurochile, lugar del segundo acto de la misión diplomática de la UE. Ahorraré la descripción de la charla-coloquio sobre las oportunidades de inversión, lo buena que es Europa, los chilenos, la innovación, la sostenibilidad (aqui dicen sustentabilidad), en definitiva ese lenguaje tan políticamente correcto que me hace venir a la cabeza las sabias palabras de Quentin Tarantino en Pulp Fiction ("No nos chupemos todavía las P....").
Primer encuentro con los empresarios y funcionarios: embajada de España, de la Delegación de la UE en Chile, patronal española, patronal Chilena, asociaciones empresariales europeas y la Fundación EuroChile. Yo me preguntaba quien iba a pagar todo aquello. Finalmente no me resistí y pregunté inocentemente a un joven funcionario acerca de las diferencias reales de funciones de la delegación de la UE respecto a una embajada europea clásica tipo novela de espías. Efectivamente, la respuesta es tan vaga como esperaba, será por prozupuesto!
En el ambiente mas informal del papeo tuve la oportunidad de entabar conversación con un curioso personaje gallego, mayor, persona pública, que al enterarse de mi subnacionalidad me eructó un "yo con los andaluces no quiero saber nada". El contraste lo puso una periodista sevillana joven exiliada por motivos económicos que contentísima me explicaba que llevaba 1 mes en Santiago y ya era responsable de comunicación. Me alegré por ella.
Pero yo estaba de muy mala leche.
Después de la comida nos llevaron en Bus con precisión de evento organizado por Bruselas (y sus 1000 funcionarios de la dirección general de industria) a la sede de SOFOFA (Sociedad de Fomento Fabril), la patronal industrial de Chile. Nueva sesión de
cancamusa, me acuerdo de
Quentin Tarantino pero de alguna forma los ponentes chilenos me caían bien.
El tema: el asocianismo, yo me pregunto, que hago aquí si yo sólo quiero conseguir proyectitos!. Horror!, el camarada gallego habla de Franco!, y de Centrales Nucleares!, que cuando van a construir los chilenos una como Dios manda?, que lo de Fukushima es culpa de la ola y que no del terremoto?.
No lo resisto. Dado que somos poca gente me sale una parrafada sobre los logros tecnológicos españoles, y de como REE (=Red Eléctrica de España, operador de nuestro sistema eléctrico) decía que era tecnológicamente imposible que el mix eléctrico tuviera mas de un 10% de fuentes de origen renovable, y hace 2 fines de semana alcanzamos la imposible cifra del 60%. Me argumentan que vale, pero que eso fue un momentito de nada. El representante chileno no queda convencido pero pienso que va a ser una persona muy interesante para visitar la semana que viene.
Por último aparece el tema de los indignadas y la "ultraviolencia" que muestran. Yo me quedo en silencio tras mi máscara de anonymous, y en ese momento lo ví claro: Delante tenía a la "Viejunocracia", mayores que gozan de un estatus envidiable, y que no entienden porque los jóvenes se quejan menos y trabajan mas.
A mi derecha está el representante de las empresas químicas y de biotecnología de Bélgica, 35 años, y comprendo porque es la persona con la que tenía mas feeling tenía desde el principio. Se refuerza mi convicción de que España "No es país para jóvenes"...
De vuelta a mi apartamento acompañado por un chileno muy agradable, que forma parte de la delegación de la Unión Europea, viajo a través del skyline, impresionante para un Alcalareño, de Las Condes.
Reflexión: Mientras nosotros cancamuseamos planificando, proyectando en términos de innovación y sostenibilidad, en Asia están diseñando la próxima generación de Smartphones que aparecerá en el mercado en Septiembre, y en Santiago finalizará la construcción de los rascacielos de arriba.