sábado, 22 de junio de 2013

Cuando veo las manifestaciones en toda Brasil, Estambul, Atenas y sobre todo en la Plazuela, recupero mi fe en el espíritu humano.

Reconozco mi alegría cuando una horda acorrala a un policía y se origina una acción de rescate, mi descojone con el desconcierto de los gobiernos, placer ante su miedo, y risa ante las llamadas a la calma... Sé que es un juego peligroso, que todos estos procesos anárquícos y desordenados siempre salieron mal en el corto plazo, aunque han definido a la humanidad en el largo, pero mi asqueo por el sistema me resulta mas insoportable.7


Desde el 17 de Junio arrancó en Chile de nuevo la temporada de la toma de centros educativos por parte de los estudiantes: desde preadolescentes a universitarios, y en este caso, a pesar de ser persona de orden, me enternece todavía mas esta acción justa y revolucionaria, aunque enfocada desde la óptica del gratis total, cosa que ya aprendí que no existe, y que de hecho hace que no las valoremos.

Chavales de todas las edades están en las puertas de los colegios pidiendo dinero, no sé bien para qué, algo he dado a cambio de un poco de conversación.

Como contraste, ayer mismo estuve en un club militar, donde solo se bebe Cutty Sark, y con la oportunidad de charlar largo rato con una persona de mi edad, alguien importante en Carabineros. El lema del club era que los rangos quedaban fuera y no insistí sobre su vida profesional.

hablamos sobre historia, encontrando un punto común en la mentalidad y cultura romana, y como la civilización cambió con el cristianismo, sus conceptos de principio y fin, dualismo bien versus mal, un solo Dios Vengador frente a decenas de Dioses cachondos y con mucha mala leche y tiempo. Un cambio revolucionario desde el punto de vista cultural...

Seguimos con la marina, la política, la situación internacional... allí vi mi oportunidad de preguntarle sobre como se ve desde Chile el fenómeno de Brasil. Me confesó que Brasil ha solicitado ayuda a Chile sobre su experiencia en control de masas y manifestaciones. Que en Brasil no están acostumbrados a los cabreos multitudinarios como en Chile.

Me insistía, y así lo creo, de la dureza del trabajo de los carabineros de Chile, de su eficiencia con pocos medios frente a las policías europeas, que tienen mas de 30 protocolos distintos en función del tipo de manifestación, y de lo difícil que resulta ser  exquisito ante manifestantes violentos y tratar luego con sus jefes políticos.

Fue interesante ver el otro lado y comprender que de verdad hay gente que se preocupa por el bienestar de la gente. Me pareció ver un sentido del honor que por desgracia está muy pasado de moda. La conversación, el respeto, la delicadeza con que me invitaron a todo, unos auténticos caballeros milicos.



Otro momento en que me asemejé a una persona de orden fue en el salar de Atacama, en el marco de la profunda amistad de un día forjada en el autobús en una excursión turística. A pié de la laguna Cejar, un Médico Santiaguino me preguntaba sobre el motivo de la debacle de España. Ante mi discurso pre-empaquetado habitual de socialdemocracia derivada en partitocracia corrupta por culpa de un pueblo que lo permitió todo,  me pidió un favor: "difunde el mensaje en Chile sobre los peligros de la mamandurria, de nunca dejar que el estado te mime con tu propio dinero". Yo le dije que Chile es profundamente liberal, que no hace falta este mensaje, pero con su rostro redondo y bigote franquista respondió que era mas necesario que nunca, que la Bachelet va a entrar pronto en el gobierno, y hay mas tentaciones que nunca en ceder la democracia por dinero.





1 comentario:

  1. Cada dia resulta mas sorprendente que aqui en España apenas haya habido revueltas! ni protestas aun incluso en los momentos mas hondos de la postresaca. Poco para lo que era previsible y muchos anunciaban. Amapola

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