jueves, 13 de diciembre de 2012

Viva Chile, Mierda!


Nadando a 90 m de altura entre cristales con vistas al skyline mas espectacular de Santiago, entiendo que soy un privilegiado, incluso con las graves limitaciones económicas que me persiguen desde España. Mi alquiler es casi el triple del salario mínimo, la desigualdad económica asusta y gran parte de la población pelea a diario con sus créditos al consumo a intereses del 20%, tal y como el ciudadano español pelea con su hipoteca al 4%.

Como dicen algunos de mis amigos chilenos mas razonables: "Este es un país de mierda!".


Para dar por finalizado mi proceso de Chilenización, me permitiré "pelar" determinados aspectos de la sociedad chilena. O mejor aún, transcribir lo que Isabel Allende, una Chilena emigrante, expresa en "Mi pais inventado".  

(...) Olvido el clasicismo y la hipocresía de la clase alta, olvido cuan conservadora y machista es la mayor parte de la sociedad  olvido la apabullante autoridad de la iglesia católica. Me espanta el rencor y la violencia alimentados por la desigualdad, pero también me conmueven las cosas buenas, que aún no han desaparecido, como esa familiaridad inmediata con que nos relacionamos, la forma cariñosa de saludarnos con besos, el humor torcido que siempre me hace reír  la amistad., la esperanza, la sencillez, la solidaridad en la desgracia, la simpatía, el valor indomable de las madres, la paciencia de los pobres. (....)






domingo, 2 de diciembre de 2012

La fuerza de la costumbre

Cuando llegué una de mis ilusiones era vivir un pequeño "terremoto", lo primero que aprendí viendo caras de terror, es que la palabra terremoto está prohibida, ya que se asocia a un evento catastrófico. Se habla de "Sismo" o "Temblor".

Los primeros meses, ya sea porque era de noche, porque iba en el metro, o porque soy un guevón, me fue imposible detectar los primeros Sismos.

A lo largo del último mes, los experiencias se han multiplicado, hasta el punto de que la excitación inicial ha dado paso a la mayor indiferencia ante las vibraciones del suelo, y créanme que las siento casi a diario.

Reconozco las posiciones donde mas se siente, tumbado en la cama o con 3 puntos en contacto con la estructura (dos piernas apoyadas firmemente y algún brazo apoyado en la mesa o la pared). Observo que mi sensibilidad es superior, en resumen, me he vuelto un cazador de Sismos.

Dicho esto, me asombra ver la reacción de los Chilenos ante el mas mínimo "temblor", dependiendo de la persona entran en pánico al instante, sobre todo si el ritmo es ascendente, los tres minutos de oscilaciones a 8,8 en 2010 han marcado ha toda una generación...